El paludismo es causado por parásitos
del género Plasmodium que se transmiten al ser humano por la picadura de
mosquitos infectados del género Anopheles que pican sobre todo entre el anochecer y el amanecer.
Hay cuatro
tipos de paludismo humano: Plasmodium falciparum, Plasmodium vivax, Plasmodium
malariae, y Plasmodium ovale.
Los
más frecuentes son el paludismo por P. falciparum y por P. vivax, y el más mortal
el paludismo por P. falciparum.
Aproximadamente la mitad de la
población mundial corre el riesgo de padecer el paludismo. La mayoría de los
casos y de las muertes se registran en el África subsahariana. No obstante,
también se ven afectadas Asia, Latinoamérica y, en menor medida, Oriente Medio
y algunas zonas de Europa. En 2014 el
paludismo estaba presente en 97 países y territorios.
El paludismo es una enfermedad febril
aguda. Los síntomas aparecen a los 7 días o más (generalmente entre los 10 y
los 15 días) de la picadura del mosquito infectivo. Puede resultar difícil
reconocer el origen palúdico de los primeros síntomas (fiebre, dolor de cabeza,
escalofríos y vómitos). Si no se trata en las primeras 24 horas, el paludismo
por P. falciparum puede agravarse, llevando a menudo a la muerte.
Grupos de alto riesgo:
1. Los niños pequeños.
2. Las embarazadas no inmunes. El
paludismo produce tasas elevadas de aborto y de mortalidad materna.
3. Las embarazadas semi-inmunes de
zonas con alta transmisión. El paludismo puede producir abortos y bajo peso al
nacer, especialmente durante los dos primeros embarazos.
4. Los pacientes con VIH/sida.
5. Los viajeros internacionales
procedentes de zonas no endémicas corren mayor riesgo de sufrir el paludismo y
sus consecuencias, pues carecen de inmunidad.
La malaria fue endémica
en España hasta la mitad del siglo XX. En 1943 se registraron 1307 muertes.
En 1964, España fue
declarada libre de malaria y recibió el certificado oficial de erradicación.
Situación
de la Malaria en Europa (30 de Septiembre de 2014)
1% casos
autóctonos: 1 Francia, 1 Holanda, 1 España y 38 en Grecia.
Grecia: Entre septiembre del 2009 y del 2012,
se diagnosticaron casos autóctonos de malaria por P. vivax en ciudadanos
griegos que no habían viajado a zonas endémicas en los últimos 5 anos.
La gran mayoría de los casos fueron
diagnosticados en el área agrícola de Evrotas, Lakonia (48 casos); pero también
en otras 5 regiones (14 casos), lo que sugiere que en esas áreas se dan las
condiciones adecuadas para la transmisión local de la enfermedad. Además de las medidas frente al vector se implementó el
cribado activo de otros habitantes de la zona y de inmigrantes temporales para
detectar otras posibles infecciones.
Para los viajeros a zonas
endémicas de malaria, se recomienda la quimioprofilaxis antimalárica. Para esas
áreas de riesgo en África y Sudamérica, la Organización Mundial de la Salud
recomienda aplicar medidas de protección para evitar picaduras de mosquitos.
En caso de utilizar profilaxis,
se recomienda el uso de Mefloquina o Doxiciclina.
Dosis de Mefloquina: 5mg/kg
semanal (adulto 1comprimido (250mg) semanal). Iniciar por lo menos 1 semana
antes de viajar y continuar por 4 semanas después del regreso.
Dosis de Doxiciclina: 1.5mg/kg
diaria (adulto 1 comprimido (100mg) diaria). Iniciar 1 día antes de viajar y
continuar por 4 semanas después del regreso.